El
Regal Barça ha revalidado su título de campeón de la
Supercopa de España al vencer este sábado al Power Electronics. A su vez,
Juan Carlos Navarro ha repetido galardón: el de jugador más valioso de la competición.
Otro título individual más que se lleva el de Llobregat y que recibe el mismo año en que fue nombrado
MVP de la Final Four, integrante del quinteto ideal de la
Euroliga y miembro del mejor quinteto de la década de la Euroliga. Y todo esto sólo en un año, pero si analizamos su
extenso currículum entre distinciones individuales, copas con el Barcelona y títulos con la selección es inevitable hacerse una pregunta...
¿Es Juan Carlos Navarro el mejor jugador de la historia del baloncesto español?
Pensemos en los candidatos a tan honorífico título que me acabo de sacar de la manga. Si cogiéramos cinco pelotas de un bombo plagado de bolas con nombres de baloncestistas repetidos tantas veces como buen juego hicieron en su época estarían además de la
Bomba, Epi, Corbalán, Fernando Martín y Pau Gasol. Al menos para mi este sería el quinteto ideal del baloncesto que hemos vivido hasta ahora.
Fernando Martín fue el primer español en jugar en la
NBA en una época en el que el baloncesto no estaba ni la mitad de avanzado que ahora, y bajo este contexto, consiguió junto con otros dos de mis nominados -Epi y Corbalán- la histórica medalla de plata en
Los Ángeles 1984. Una hazaña para la época de la que debemos estar muy orgullosos. El madrileño además hizo un contrato récord a su vuelta al
Real Madrid, su dorsal número 10 es el único retirado en el club blanco e incluso tenía videojuego:
Fernando Martín Basket Master.
Aunque menos mediático que su compañero de selección,
Juan Antonio Corbalán es toda una institución en nuestro baloncesto y su nombre sale a relucir con frecuencia cuando se habla de
Ricky Rubio porque el base madrileño debutó a los 17 años y está considerado el mejor conductor europeo de su época. Entre los títulos en su haber se encuentran 12 ligas, 1 copa Korak, 1 mundialito de clubes, 7 copas de España, 3 copas de Europa y otras tantas intercontinentales.
En ese grupo dirigido por
Antonio Díaz-Miguel en L.A 1984 estaba Juan Antonio San Epifanio, más conocido como "Epi", el mejor jugador europeo de la década de los ochenta según el diario deportivo
L'Equipe. Sin Epi la plata olímpica no se podría concebir. Con su trayectoria en mano no quiero ni pensar cómo sería si hubiera jugado en la época de los golden boys ya que en veinte años el baloncesto español y mundial ha evolucionado inconmensurablemente. Los récords del baloncesto español que no ha conquistado Navarro o no conquistó
Alberto Herreros-otro de los grandes- los tiene él.
Y no son pocos.
El quinto en discordia es el único que en la actualidad hace sombra a Juan Carlos y que, paradojas de la vida, es uno de sus mejores amigos: Pau Gasol. El jugador de
Los Angeles Lakers ha conseguido
todo lo que se puede conseguir como jugador de baloncesto. O casi todo; le falta ser MVP de la NBA y la pasada temporada estuvo cerca de conseguirlo. Con toda probabilidad Gasol acabará en el
Hall of Fame y su número en las esferas del
Staples Center.
Por estos logros, sería ridículo negar que Gasol es el mejor jugador español de la historia que llevamos, pero aunque también fuera brillante, su trayectoria en España no es comparable a la de su amigo. El mejor equipo de Europa, el Regal Barça, se ha formado prácticamente en torno a él. La figura de Navarro es también imprescindible para entender todas las medallas que la
ÑBA ha cosechado en los últimos años. Su "bomba" ha creado escuela como ya hiciera
Bodiroga con su “látigo”. Es un hecho que Navarro formará parte de la historia de la ACB, de la Euroliga y del baloncesto mundial. Es el jugador español que mejor ha jugado en la ACB, el mejor jugador de la historia de nuestro baloncesto.